Domingo magnífico para hacer footing, sol, temperatura agradable todos
los ingredientes apropiados para el disfrute en la ciclovìa con el estupendo paisaje
de fondo “del mar”.
Riograndenses desplazándonos algunos
a pie, con rollers y otros en bicicleta con mucha aptitud, retomando la sana
costumbre de la práctica deportiva en contacto con la naturaleza y en espacios abiertos,
que tanto nos gusta y que el clima fue postergando, pero………. a cada paso que
avanzaba no podía disimular mi asombro ante la cantidad de desechos inorgánicos
y orgánicos tratando de esquivarlos (entiéndase bien clarito “une crotte de chien”
defecación de can) como sembrados al azar iban enmarcando a lo largo del recorrido.-¿Qué nos pasa? Porque si somos tan críticos para algunas cosas no somos capaces de respetar algo que compartimos visualmente y que nos marchita desde afuera hacia nuestro interior.
Porque no nos hacemos cargo de aquello que generamos, debiéramos reflexionar
acerca de nuestras conductas, lo repetiríamos en nuestra propio ámbito cotidiano,
en nuestro jardín, arrojando botellas rotas, etc, etc, quizás la equivocada sea
yo y gran parte de la gente viva así entre residuos y “crotte de chien”.Sumémonos a la campaña “Mantengamos limpia la ciudad” es un compromiso de todos.
